Alopecia por Tracción

𝗟𝗮 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗽𝗼𝗿 𝘁𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗲𝘀 𝘂𝗻𝗮 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝘁𝗲𝗺𝗽𝗼𝗿𝗮𝗹 𝗼 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗴𝗿𝗮𝗰𝗶𝗮𝘀 𝗮 𝗹𝗮 𝘁𝗲𝗻𝘀𝗶𝗼́𝗻. Está es una de las causas más frecuentes de pérdida de cabello en niñas en edad escolar, practicantes de bale y alguna última moda juvenil (Mirmirani & Khumalo, 2014; Suro, 2010).

El dermatólogo austríaco Trebic informó del primer caso de alopecia por tracción a medida que viajaba por Groenlandia en 1907, por tal fundamento lo nombro "𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗚𝗿𝗼𝗲𝗻𝗹𝗮𝗻𝗱𝗶𝗮" 𝗮𝗹 𝗼𝗯𝘀𝗲𝗿𝘃𝗮𝗿 𝗮 𝗹𝗮𝘀 𝗱𝗮𝗺𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗽𝗲𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼𝘀 𝗱𝗲 "𝗰𝗼𝗹𝗮 𝗱𝗲 𝗰𝗮𝗯𝗮𝗹𝗹𝗼", 𝗹𝗼𝗴𝗿𝗮𝗻𝗱𝗼 𝗲𝘅𝗽𝗼𝗻𝗲𝗿 𝗮́𝗿𝗲𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗽𝗲́𝗿𝗱𝗶𝗱𝗮 𝗱𝗲 𝗰𝗮𝗯𝗲𝗹𝗹𝗼 𝗽𝗿𝗶𝗻𝗰𝗶𝗽𝗮𝗹𝗺𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗲𝗻 𝗹𝗮 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗳𝗿𝗼𝗻𝘁𝗮𝗹 (Billero & Miteva, 2018; Hjorth, 1957). 

Asimismo, la “𝗰𝗮𝗹𝘃𝗶𝗰𝗶𝗲 𝗱𝗲𝗹 𝗰𝗵𝗼𝗻𝗴𝗼”, descrita en 1931 por Sabouraud, es un tipo diverso de alopecia por tracción no marginal que 𝘀𝗲 𝗽𝗿𝗲𝘀𝗲𝗻𝘁𝗮 𝗲𝗻 𝗲𝗹 𝗰𝘂𝗲𝗿𝗼 𝗰𝗮𝗯𝗲𝗹𝗹𝘂𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝘇𝗼𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗻𝘂𝗰𝗮, 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝗰𝗼𝗻𝘀𝗲𝗰𝘂𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗮𝗻𝘂𝗱𝗮𝗿 𝗲𝗹 𝗰𝗮𝗯𝗲𝗹𝗹𝗼 𝗲𝗻 𝗹𝗮 𝗽𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗽𝗼𝘀𝘁𝗲𝗿𝗶𝗼𝗿 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗰𝗮𝗯𝗲𝘇𝗮 (Hjorth, 1957).

Por otro lado, 𝗹𝗮 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗽𝗼𝗿 𝘁𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗲 𝗵𝗮 𝗮𝘀𝗼𝗰𝗶𝗮𝗱𝗼 𝗰𝗼𝗻 𝘃𝗮𝗿𝗶𝗼𝘀 𝘁𝗶𝗽𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗽𝗲𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼𝘀 relacionados con prácticas culturales, religiosas y ocupacionales (Billero & Miteva, 2018; Suro, 2010). Estos peinados esculpidos que requieren de diversos ganchos para conservar el cabello en su sitio, pueden ocasionar una caída traumática del cabello(S.M. et al., 1999).

𝐄𝐥 𝐢𝐧𝐜𝐫𝐞𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐭𝐫𝐚𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐝𝐞𝐥 𝐜𝐚𝐛𝐞𝐥𝐥𝐨 𝐝𝐞𝐭𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐢𝐧𝐜𝐡𝐚𝐳𝐨́𝐧 𝐟𝐨𝐥𝐢𝐜𝐮𝐥𝐚𝐫 𝐥𝐞𝐯𝐞, que si es utilizada por un largo lapso de tiempo puede causar una caída capilar y una atrofia folicular con pelos más finos y cortos, proceso que en un comienzo puede ser reversible, no obstante, 𝗱𝗲 𝘀𝗲𝗿 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗶𝘀𝘁𝗲𝗻𝘁𝗲 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲 𝗰𝗮𝘂𝘀𝗮𝗿 𝗽𝗼𝗿 𝘂́𝗹𝘁𝗶𝗺𝗼 𝗰𝗶𝗰𝗮𝘁𝗿𝗶𝗰𝗲𝘀 𝘆 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗽𝗲𝗿𝗺𝗮𝗻𝗲𝗻𝘁𝗲 (Urbina et al., 2009).

En la 𝗳𝗮𝘀𝗲 𝗶𝗻𝗶𝗰𝗶𝗮𝗹, 𝗹𝗼𝘀 𝗽𝗮𝗰𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀 𝗮𝗰𝗼𝘀𝘁𝘂𝗺𝗯𝗿𝗮𝗻 𝗲𝘅𝗽𝗼𝗻𝗲𝗿 𝘇𝗼𝗻𝗮𝘀 𝗱𝗲 𝗽𝗲́𝗿𝗱𝗶𝗱𝗮 𝗱𝗲 𝗰𝗮𝗯𝗲𝗹𝗹𝗼 𝗾𝘂𝗲 𝗻𝗼 𝗱𝗲𝗷𝗮 𝗺𝗮𝗿𝗰𝗮𝘀 en toda el área del cuero cabelludo que está bajo tensión, pero la caída del pelo puede suceder en cualquier área del cuero cabelludo dependiendo del peinado. A parte, también se aprecian por esta acción, pelos rotos y pústulas en los folículos (Billero & Miteva, 2018).

En sus 𝘂́𝗹𝘁𝗶𝗺𝗮𝘀 𝗳𝗮𝘀𝗲𝘀, 𝗹𝗮 𝗽𝗮𝘁𝗼𝗹𝗼𝗴𝗶́𝗮 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲 𝗽𝗿𝗼𝗴𝗿𝗲𝘀𝗮𝗿 𝗮 𝘂𝗻𝗮 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗰𝗶𝗰𝗮𝘁𝗿𝗶𝗰𝗶𝗮𝗹 𝗶𝗿𝗿𝗲𝘃𝗲𝗿𝘀𝗶𝗯𝗹𝗲 𝘀𝗶 𝗲𝗹 𝗽𝗲𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼 𝘁𝗿𝗮𝘂𝗺𝗮́𝘁𝗶𝗰𝗼 𝗰𝗼𝗻𝘁𝗶𝗻𝘂́𝗮 𝘀𝗶𝗻 𝗹𝗮 𝗮𝘀𝗲𝘀𝗼𝗿𝗶́𝗮 𝗶𝗱𝗼́𝗻𝗲𝗮. Además, Los pacientes tienden a presentar dolor a la palpación, picazón y dolor de cabeza (Billero & Miteva, 2018).

Esta tensión “excesiva” es complicada de cuantificar, debido que cada individuo tendrá un umbral diferente en el que se encuentre dañando el folículo piloso. Una vez que el cabello se tira con tanta fuerza provocando que la dermis del cuero cabelludo se levante por la acción ejercida, es una clara indicación de que existe una tensión desmesurada en el cuero cabelludo y debería evitarse (Mirmirani & Khumalo, 2014).

En conclusión, 𝗹𝗮 𝗮𝗹𝗼𝗽𝗲𝗰𝗶𝗮 𝗽𝗼𝗿 𝘁𝗿𝗮𝗰𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘀𝗲 𝗽𝘂𝗲𝗱𝗲 𝗽𝗿𝗲𝘃𝗲𝗻𝗶𝗿 𝗰𝗼𝗻 𝗹𝗮 𝗮𝗱𝗲𝗰𝘂𝗮𝗱𝗮 𝗲𝗱𝘂𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝘆 𝗰𝗼𝗻𝗰𝗶𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮, teniendo siempre en cuenta que es un factor externo que lo ocasiona una tendencia social, cultural u ocupacional.